Hace ya unos años que leí la magnífica novela de Murakami, "Tokio Blues", y lo último que me podría imaginar es que alguien se atreviera a realizar una adaptación al cine. Antes pensaba que no toda obra literaria podría llevarse a las pantallas. Existen gran cantidad de obras plagadas de sentimientos, pensamientos y reflexiones de los protagonistas que, a la hora de ser planificadas, quedarían resumidas a unos subjetivos repletos de patéticas voces en off. Miles de palabras que no podrían ser expresadas como imágenes y un libro de trescientas páginas quedaría consumido a una trama apta para un cortometraje.
Por toda esta reflexión, no creía que fuera posible proporcionar cuerpo y alma en 35 mm. a Watanabe, a Naoko y a Midori. Después de visualizar el trailer unas cuantas veces, ya no soy tan escéptico y puede que esta adaptación merezca la pena y que hayan sabido descolgarse de las palabras a la hora de crear una versión realmente visual, atractiva para amantes de historias intensas, íntimas, profundas y difíciles de encontrar en la industria actual.
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